Georgina – Capítulo 36: Octavio 2

Georgina toda una vida de travestismo.

CAPÍTULO 36 OCTAVIO 2

Después de brindar una vez más por el gusto de conocernos vi que Octavio consultaba su Rolex de oro y yo hice lo mismo consultando mi Timex de plástico, parecía increíble pero habíamos estado charlando por más de 6 horas, y yo estaba entusiasmada escuchando su historia con mucho interés, mas conforme avanzaba su relato yo sentía que iba conociendo al verdadero Octavio.

Llena de curiosidad le pregunté: fue la única vez que te la cogiste?

Inmediatamente contestó: no Gina… de hecho esa noche me la culee cuatro veces, recuerda que me había costado carísima y yo tenía que aprovechar al máximo la oportunidad de cogerle a mi diosa, la verdad es que el ultimo palo se lo di casi a la fuerza, ella ya no quería seguir cogiendo, en realidad este no lo disfruté tanto porque ella con sus manos me detenía para evitar que se la metiera toda, jeje… parecía que la estaba violando.

Por fin… como a las diez de la mañana la dejé ir, yo me quedé acostado y me quedé profundamente dormido… desperté como a las cuatro de la tarde muriéndome de la cruda, busqué algo para beber pero la botella de coñac estaba vacía… entonces vi la botella de champán que ella casi no había tocado, ansiosamente bebí de ella y… !Era soda de manzana! casi me ahogo por la sorpresa, me habían cobrado una botella de champán viuda de Cliquot y le habían servido !refresco de manzana!… no pude evitar reír como loco !me habían visto la cara de pendejo… con la complicidad de ella.

No pude evitar preguntarle a Octavio: y la volviste a ver?

Si Gina… Me obsesioné con ella, venía a México cada que tenía oportunidad, a veces los cuatro fines de semana de cada mes… Siempre me la llevaba al hotel y le daba unas tremendas culeadas , siempre pagando por sus servicios pero ella cada vez se volvía más exigente, me pedía más dinero o me pedía que le regalara alguna joya… realmente gasté mucho dinero en ella, a veces me decía que su mamá, su hermana o algún pariente estaba enfermo etc.

Cuando le negaba el dinero se enfadaba y se portaba muy fría conmigo, pero si le cumplía sus caprichos me dejaba culeármela a mi gusto, por supuesto mi padre se dio cuenta que yo estaba gastando mucho y me llamó a cuentas… Decidí decirle la verdad… A medias… Le dije que en la última ocasión que fui a México con el vimos a una vedette que a él le pareció hermosa, y que actualmente me la estaba cogiendo y que para tenerla contenta le hacía regalos costosos… Mi padre solo se rió y abrazándome me dijo: !así me gusta cabrón que seas todo un macho!… Pero ten mucho cuidado y no te vayas a meter en problemas, la próxima vez que vayamos a México me la presentas, cabrón.

Y en eso quedó la bronca con mi papá.

Pregunté curiosa: y la conoció tu papá?

!No, ni madres! Respondió el viejo tenía una memoria de elefante… Se iba a acordar que ella era travestí… Una vedette si… !pero  joto! Se hubiera muerto de vergüenza si se hubiese enterado era muy machista el viejo cabrón.

Pregunté una vez más: bueno  la conoció o no?

Tuve que recurrir a un truco para apaciguar al viejo, durante una de mis visitas a México para cogerme a Gloríela se me ocurrió una idea: fui a un cabaret que había visitado con mi padre y establecí una relación puta – cliente con la mejor vedette del antro y cada que venía a ver a Gloríela pasaba a ver a mi vedette mujer, le echaba un palito rápido y le regalaba alguna alhaja… jeje, así que cuando mi padre vino conmigo a la ciudad inmediatamente lo llevé a conocer a mi puta y con eso quedó resuelto el problema.

Y seguiste viendo a Luela… Gloríela o como se llame? pregunté realmente intrigada.

Si… durante unos seis meses más pero me di cuenta que solo me veía como un cliente más, y cada día sus exigencias aumentaban, hasta que me aburrí y deje de visitarla, pero se me quedó el gusto por los travestis… Mientras más femeninos mejor, en provincia es muy difícil encontrar travestis por el pinche machismo… tu sabes Gina, pero aquí en México hay mas chance, aquí conseguí la revista en la que vi tu anuncio, decidí escribir a tu apartado… y aquí estamos.

Pues si aquí estamos respondí, la verdad es muy interesante tu historia… Me permitió conocer tres detalles interesantes acerca de ti… que estás bien dotado, que te gusta coger con chicas como yo y que te gusta ir directo al grano… y eso me gusta.

Para ese momento ya habíamos ingerido seis o siete copas, así que estábamos un poco ebrios, y ustedes mis queridos lectores saben que si sobria soy muy puta… ebria soy !PUTISIMA! además la historia de Octavio me había puesto muy cachonda.

Entonces Octavio hizo la pregunta que yo esperaba oír: entonces que Gina, quieres ir al hotel?

!Por supuesto que si papi, vamos! estoy muy cachonda.

Respondió: Sabía que contigo iba a tener suerte vámonos mamita.

Total… Allegamos a su cuarto mientras Octavio entraba al baño a mear me dijo: ponte cómoda mamacita si quieres tomar algo ahí está el servibar toma lo que gustes.

Saqué un botellín de vodka y una agua quina para prepararme un vodka-tonic mientras lo bebía me quité el vestido y el fondo, quedando solo con mi lencería negra y mis zapatillas rojas, cuando Octavio salió del baño me recorrió con la mirada y me dijo: mamacita te ves bien sabrosa, te voy a coger muy rico Gina.

Si papi… me lo prometes? pregunté.

Te lo prometo y !te lo meto! respondió Octavio abrazándome por detrás mientras me manoseaba y me besaba el cuello, yo estaba parada frente al espejo del servibar y pude ver nuestra imagen tan contrastante: Octavio grandote macizo y yo pequeñita y nalgona, volteé y me abracé a el… tuve que pararme de puntitas aun con mis zapatillas para poder alcanzar sus labios con mi boca, así prácticamente colgada de el estuvimos besándonos hasta que sin dejar de besarme me cargó en sus brazos y me llevó a la cama donde me depositó gentilmente, realmente era notable que a pesar de su enorme cuerpo pudiera tratarme con tanta suavidad… como si yo fuera una muñeca de frágil porcelana.

Me estaba conquistando rápidamente este hombrezote, me besaba muy rico mientras recorría todo mi cuerpo con sus manotas haciéndome gemir de pasión… Le fui quitando la ropa mientras seguíamos besándonos, cuando le quité el bóxer comprobé que si estaba bien dotado… Su verga era muy grande no tan grande como la de Joselinho pero casi, era una vergóta blanca, casi lampiña su cabeza rosada… era un capullo grueso parecía un hongo, me puse muy cachonda pensando en lo que ese tremendo capullo iba a causar en mi culo, de inmediato lo tomé con mis manos y halándolo de la vergota lo llevé a la cama, acostado en ella de espaldas me empine y comencé a mamar con ansiedad ese lindo camote… puse mis nalgotas al alcance de sus manos y él me hizo poner en posición de 69 metiendo su dedo en mi culito mientras me chupaba la verga, yo sentí divino el roce de su dedo y la rica mamada hacían que mi calentura subiera al máximo, mi culito palpitaba suplicando pidiendo ser penetrado por esa rica vergota que yo mamaba con desesperación me gustaba la forma del rico pito su cabeza era realmente grande apenas cabía en mi boca y cuando la sacaba su borde rozaba mi lengua y mi paladar, mi imaginación volaba pensando que mi culito iba a ser perforado muy rico… cuando no pude más le pedí jadeando: !ya Octavio meteme toda la vergota! !quiero sentir tu vergota en mi colita! yo estaba ansiosa por sentir ésa cabezota perforando mi culo… Inmediatamente me puse en cuatro patas como perrita, empinada en la cama abrí mis nalgotas con mis manos ofreciéndole mi ojete completamente lubricado suplicando: !por favor Octavio clavame tu vergota en el culo! !por Petula… te juro que ardo en deseos de sentir tu vergota dentro de mi colita! !dame verga papi… rompeme el culo!

Octavio se puso de rodillas tras de mí y dirigió su vergota a mi ansioso ano, cuando sentí la cabezota de su vergota en la entrada de mi colita arremetí hacia atrás desesperada por ensartarme cuando entró su capullo sentí como su amplio prepucio rozaba los pliegues de mi ano abriéndolo al máximo… yo entré en un delirio total, ese capullo causaba muchas sensaciones afrodisíacas en mi colita, continuó metiendo su vergota en mi colita… yo sentía como rozaba mi intestino y mi próstata entró en erupción, yo apretaba mi esfínter anal aprisionando ese rico camote, suspirando de placer le pedía más y más verga… quería tragarme por el culo a ese macho… Completamente ebria de placer disfruté cada milímetro de deliciosa verga entrando en mi colita… hasta que Octavio me anunció: ahora sí mamacita… !te la tragaste toda! !te tengo bien ensartada… hasta los huevos! !que rico me aprietas la verga! !mueve tus nalgotas mamacita! !que rico culito tienes mami!

Yo movía mis caderas hacia adelante y atrás clavándome en esa rica estaca gimiendo de placer… Le pedí que aumentara sus embestidas, quería que me culeara más fuerte, su vergota estaba causando verdaderos estragos en mi recto… mi culo estallaba en una serie de contracciones que me provocaron mi primer orgasmo anal, mi macho me tenía tomada por las caderas machacando mi jubiloso culo a placer… Realmente era una sensación increíble su capullo rozaba mi culo como si fuera un destapacaños abarcaba todo mi esfínter anal en su totalidad despertando sensaciones increíbles en mi colita… yo echaba mi culo hacia atrás buscando la máxima penetración, quería tragarme ésa rica vergota entera mi culo gobernaba mi cerebro… ansiaba que ésa maravillosa vergota abriera mi culo al máximo, estaba gozando como loca la rica culeada, pedí !cogeme más fuerte papi! !abre mi culito! !clavame toda tu vergota… hasta los huevos!

Octavio me tenía bien ensartada yo solo jadeaba y movía mis nalgotas recibiendo verga completamente entregada… me encanta ser dominada en la cama, me excita sentir a un macho haciendo con mis nalgotas lo que se le antoja… es la prueba máxima de mi feminidad, sentir que me cogen como a una mujercita me pone muy cachonda. No hay nada más rico que tener una rica vergota perforando mi culito !me encanta la verga! !adoro la verga! !soy una verdadera puta! es delicioso estar empinada en cuatro patas… como perrita recibiendo la vergota de su macho por el culo mientras me masturbo !es lo más rico que existe!

Octavio me dijo: Gina que nalgotas tan sabrosas tienes aprietas el culo bien rico… me gusta que seas tan puta… se nota que te encanta la verga mami.

Jadeando contesté: si papi me gusta la verga… !cogeme más fuerte papi… meteme toda tu vergota hasta los huevos! !quiero sentir tu leche en mi culito! !dame tu leche en mi culito! !no dejes de cogerme!

Me dijo: no mami no me quiero venir todavía, quiero seguir disfrutando de tu rico culito, a ver mamacita… ponte acostada de espaldas en la cama, te voy a coger de patitas al hombro… sacando su vergota de mi culito me hizo poner en posición y poniendo mis piernas sobre sus hombros mientras yo tomaba su vergota y la dirigí a mi hambriento hoyito y con la otra mano jale mi nalga para facilitar la penetración, y de un solo empujón me la clavó toda su capullo causó unos espasmos deliciosos en mi culito, haciéndome aullar de placer… mientras mi macho me besaba me decía: !mamita estás bien buena… que rica colita tienes! !te encanta la verga! !eres una verdadera puta! me gusta ver mi vergota entrando en tu culito, es muy excitante ver como tragas verga por el culo.

Yo sólo jadeaba y balbuceaba: si papi me encanta la verga… soy una puta !cogeme más fuerte papi! !dame más verga! !meteme toda tu vergota hasta los huevos! !llename el culo de leche!

Octavio aceleró sus estocadas y unos minutos después se vino copiosamente dentro de mi colita llenando mis intestinos de rica leche mientras yo me masturbaba frenéticamente hasta que me vine en mi mano y de inmediato bebí mis propios mocos con deleite, limpiando mis dedos con mi lengua… quedamos enchufados un rato descansando hasta que Octavio sacó su vergota semi erecta de mi colita y se tumbó a mi lado.

Esa noche cogimos por horas disfrutando de nuestros cuerpos, conociendo cada pliegue de nuestras anatomías, ahora iniciaba una nueva relación con un macho.

Continuará…